El Exynos 2400 podría contar con una GPU Radeon RDNA3 con 256 shaders

Hace apenas unos días vimos que Samsung y AMD estaban trabajando, en teoría, en una nueva GPU que estaría optimizada para ser utilizada en un nuevo SoC, y este podría ser el Exynos 2400, un chip que se utilizaría en el Galaxy S24 y que supondría la vuelta de Samsung a sus propias soluciones, aunque obviamente no implicaría un abandono completo de los Snapdragon.

Según una nueva filtración, que procede de fuentes surcoreanas, el gigante surcoreano está perfilando la configuración de una nueva GPU basada en la serie Radeon de AMD que podría ser utilizada en el Exynos 2400, y que contará con un total de cuatro unidades de computación. Si ponemos esto en perspectiva, nos encontraríamos con un total de 256 shaders o procesadores de flujo, como queráis llamarlos (su función es la misma).

Esos 256 shaders estarían acompañados de 16 unidades de texturizado, 8 unidades de rasterizado y dos núcleos para acelerar trazado de rayos. Si se confirma el uso de la arquitectura RDNA3, esa GPU tendrá, además, cuatro núcleos especializados en inferencia e inteligencia artificial, un hardware que Samsung podría aprovechar para mejorar las prestaciones de su SoC en fotografía computacional y en otras tareas que pueden beneficiarse de la inferencia y el aprendizaje profundo.

Lo ideal sería precisamente eso, que Samsung utilizara la arquitectura RDNA3 porque, como sabrán muchos de nuestros lectores, ésta está fabricada en un nodo más avanzado y es más eficiente, dos claves que deberían facilitar a la compañía surcoreana su adaptación a un SoC para dispositivos móviles. En este sentido, será interesante ver qué puede dar de sí esta arquitectura con un consumo muy limitado y cómo afecta esto a sus frecuencias de trabajo, y al rendimiento general.

En cuanto a la configuración CPU del Exynos 2400, se sigue rumoreando que este SoC podría venir equipado con una CPU de 10 núcleos, distribuidos como siempre en un bloque de máximo rendimiento, otro de alto rendimiento y otro de alta eficiencia, pero todavía no hay nada confirmado, así que ahora mismo solo podemos esperar a ver cómo evolucionan los rumores y las filtraciones en los próximos meses.

Tened en cuenta algo muy importante, y es que el futuro del Exynos 2400 no solo depende de los resultados que consiga Samsung al adaptar la arquitectura RDNA3 y al integrar esa nueva CPU, sino que también se verá influido por la tasa de éxito que consiga el gigante surcoreano al llevarlo a la oblea. Si la tasa de éxito por oblea no es buena, y los costes de producción se acaban disparando, puede que opte por abandonar ese proyecto y volver a utilizar un Snapdragon de nueva generación.