Grok, la IA de Twitter entrenada con tweets. ¿Qué puede malir sal?

Grok (que no Groot, lo que habría resultado paradójico pero divertido) es un término que, según el Oxford English Dictionary, podemos interpretar como «comprender intuitivamente o por empatía, establecer una relación con» y «empatizar o comunicarse con simpatía (con); además, experimentar disfrute«. Hay bastante literatura sobre el significado original del término, acuñado por Robert A. Heinlein para su novela Forastero en tierra extraña, de 1961, aunque podemos resumirlo en una especie de comprensión absoluta e intuitiva de algo.

Hasta ahora era un término de uso muy minoritario, pero esto va a cambiar puesto que Grok ha sido el nombre elegido por Elon Musk para el primer modelo y servicio de inteligencia artificial salido de xAI, la compañía que fundó hace unos meses y con la que pretende plantar cara a los gigantes del sector, ofreciendo una alternativa a Bard, Bing, ChatGPT y demás. Vivimos los tiempos de los LLM (Large Language Model), de modo que era el primer paso lógico que cabía esperar.

El uso de un término de Forastero en tierra extraña no es la única referencia a la ciencia ficción, el tweet publicado por xAI en el que anuncia Grok afirma que, para su confección, se han basado en la guía que da nombre a Guía del autoestopista galáctico, una de las mejores novelas del género y a la que Musk ya ha aludido en anteriores ocasiones, como con la toalla alojada en el Tesla Roadster puesto en órbita en 2018 o con el huevo de pascua de los vehículos Tesla al intentar cambiar su nombre a 42.

Creada por xAI, Grok es la primera IA de la empresa de Elon Musk y debutará en Twitter, como servicio exclusivo para los suscriptores y, según se afirma en algunos medios, únicamente para los de Premium+, el recientemente anunciado nuevo nivel de suscripción de la red social. ¿Y cuál es el factor diferencial de Grok con respecto a otros servicios como los anteriormente mencionados? Pues, y aquí es dónde empiezan las curvas, que el modelo se ha entrenado precisamente con el contenido de Twitter.

Muchos aún recordamos el traumático aprendizaje que experimentó Microsoft con Tay, un bot creado por los de Redmond, que fue puesto en marcha en Twitter el 23 de marzo de 2016 y que, en pocas horas y «gracias» a sus interacciones con los usuarios de la red social, ya proporcionaba respuestas racistas, sexuales, información falsa… en fin, que se empapó muy bien y muy rápidamente del espíritu de la red social. A las 16 horas de su puesta en marcha, Microsoft decidió «apagarlo» para siempre.

Confío en que, en el entrenamiento de Grok, xAI habrá empleado también otras fuentes, no solo las publicaciones de Twitter, pero es que incluso en ese caso, y salvo que el proceso de selección de los datos para la ingesta haya sido excepcionalmente amplio, nos podemos esperar una IA cargadita de sesgos, memes e información falsa. Y no sé, pero si hay una consulta a un chatbot sobre un asunto que me inquieta, preferiría no recibir una respuesta al estilo de «para q quieres saber eso jaja salu2». Pero bueno, vivimos en la era de los memes, así que, como ya planteaba al inicio de esta noticia, ¿que puede malir sal?

La entrada Grok, la IA de Twitter entrenada con tweets. ¿Qué puede malir sal? se publicó primero en MuyComputer.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Seat Ateca, vistas

Hyundai Staria, calibre

Alienware Area-51m, el portátil gamer más potente