Forspoken es un desastre en PC y su calidad gráfica deja mucho que desear

Desde que se produjo su presentación Forspoken se convirtió en uno de los juegos más esperados del momento, algo totalmente comprensible ya que los primeros vídeos mostraban un apartado técnico impresionante, y además se confirmó que este iba a ser el primer juego para PC capaz de aprovechar la tecnología DirectStorage.

Esa tecnología utiliza la GPU para realizar las tareas de descompresión del SSD. Esto libera a la CPU de dichas tareas, y permite minimizar los tiempos de carga. La diferencia que puede marcar es tan grande frente al proceso tradicional de descompresión por CPU que los tiempos de carga se pueden reducir a poco más de un segundo.

El caso es que, al final, buena parte de las promesas que se hicieron con Forspoken no se han cumplido. He tenido la oportunidad de probar la demo en mi PC, un equipo de gama alta, y os puedo confirmar que no solo no está a la altura a nivel técnico, sino que además tiene una historia mejorable, una protagonista aburrida y una jugabilidad repetitiva que os cansará en poco tiempo si no sois amantes del género.

No, no vale la pena pagar 80 euros por Forspoken, y de hecho tengo mis dudas sobre si llegaría a comprarlo cuando esté de oferta a menos de 30 euros. En este artículo os voy a explicar por qué, pero antes vamos a ver las especificaciones del PC sobre el que he probado este título:

• Sistema operativo Windows 10 Pro de 64 bits.
• Procesador Ryzen 7 5800X (Zen 3) con ocho núcleos y dieciséis hilos a 3,8 GHz-4,7 GHz.
• Placa base GIGABYTE X570 AORUS Ultra.
• 32 GB de memoria RAM Corsair Vengeance RGB Pro SL a 3.200 MHz CL16 (cuatro módulos).
• Sistema de refrigeración Corsair iCUE H150i Elite Capellix White con tres ventiladores Corsair ML RGB de 120 mm.
• Tarjeta gráfica GeForce RTX 3090 Ti Founders Edition con 24 GB de GDDR6X.
• Tarjeta de sonido Sound BlasterX AE-5 Plus.
• SSD PCIE NVMe Corsair MP400 de 4 TB (donde instalamos el juego).
• SSD PCIE NVMe Corsair MP600 Core de 2 TB.
• SHDD Seagate de 2 TB con 8 GB de SSD como caché.
• Fuente de alimentación Corsair AX1000 80 Plus Titanium con certificación 80 Plus Titanio.

Vamos a ver también los requisitos de Forspoken para descubrir qué necesitamos para moverlo en condiciones óptimas. Ya os adelanto que son demasiado altos para lo que ofrece este juego a nivel técnico, y que no tienen sentido.

Requisitos mínimos

• Windows 10 de 64 bits como sistema operativo.
• Procesador Intel Core i7-3770 (4 núcleos y 8 hilos) o Ryzen 5 1600 (6 núcleos y 12 hilos). Hay un error de equivalencia, lo correcto sería el Ryzen 5 1400 (4 núcleos y 8 hilos).
• 16 GB de RAM.
• Tarjeta gráfica GeForce GTX 1060 de 6 GB o Radeon RX 5500 XT de 8 GB.
• 150 GB de espacio libre en un disco duro, aunque se recomienda SSD.

Requisitos recomendados

• Windows 10 o Windows 11 de 64 bits como sistema operativo.
• Procesador Intel Core i7-8700K (6 núcleos y 12 hilos) o Ryzen 5 3600 (6 núcleos y 12 hilos).
• 24 GB de RAM.
• Tarjeta gráfica GeForce RTX 3070 o Radeon RX 6700 XT.
• 150 GB de espacio libre en un SSD.

Requisitos ideales

• Windows 10 o Windows 11 de 64 bits como sistema operativo.
• Procesador Intel Core i7-12700 (12 núcleos y 20 hilos) o Ryzen 7 5800X (8 núcleos y 16 hilos).
• 32 GB de RAM.
• Tarjeta gráfica GeForce RTX 4080 o Radeon RX 6800 XT. Hay un error grave de equivalencias, lo correcto sería una GeForce RTX 3080.
• 150 GB de espacio libre en un SSD NVMe para aprovechar DirectStorage.

Forspoken no está a la altura en calidad gráfica

Y resultan bastante evidentes incluso con un PC de gama alta que cumple de sobra con todos los requisitos. El juego ofrece un menú de configuración gráfica bastante sencillo, es compatible con NVIDIA DLSS y con AMD FSR, dos tecnologías que nos permitirán mejorar el rendimiento de forma notable, y cuenta con trazado de rayos aplicado a sombras.

En mis pruebas he configurado el juego en 1440p con calidad máxima, trazado de rayos y DLSS en modo calidad. Nada más arrancar el juego he notado pequeños tirones tirones, y me he llevado la primera decepción al ver un escenario muy soso con texturas mejorables, una vegetación a la altura de títulos de PS4, una iluminación excesiva y muy mal ejecutada y una geometría que, en algunos casos, llega a estar incluso al nivel de un título de PS3. Fijáos en los picos de madera de la imagen adjunta y en la calidad de las texturas, el resultado es muy pobre y no está ni de lejos a la altura de lo que esperábamos.

Seguimos repasamos el acabado técnico y pasamos ahora a hablar del modelado de la protagonista. Creo que la imagen adjunta habla por sí sola, tenemos un modelado bastante cutre que no llega ni siquiera al nivel de lo que hemos visto en juegos de transición intergeneracional como Resident Evil 2 Remake, y que confirma lo que venía siendo un secreto a voces, que Forspoken ha recibido un enorme downgrade a nivel gráfico que se deja notar en todos los sentidos.

El modelado es terrible, y lo mismo sucede con la calidad de buena parte de la geometría, la iluminación y el nivel de detalle de los escenarios, pero es importante detenernos un momento a hablar de esto último. Los escenarios no solo están muy vacíos, sino que apenas tienen vida, presentan una densidad de vegetación mucho menor a la que mostraba el juego en sus primeros vídeos y el texturizado y teselado del suelo deja mucho que desear. No hay por dónde cogerlo, la verdad.

En la imagen que encontraréis justo encima de estas líneas podéis verlo con más detalle. Fijaos en la vegetación y en el texturizado del suelo, parece mentira que se trate de un juego exclusivo de PS5 y de PC, ya que hemos visto títulos de transición generacional que lucen mucho mejor que Forspoken, y lo que vemos no tiene nada que ver con lo que se mostró en los vídeos de presentación de este juego.

En la imagen superior se aprecian de nuevo los problemas he citado anteriormente, y tenemos otro que aún no habíamos nombrado, la distancia de renderizado, que es muy pobre y presenta un nivel de calidad muy baja, tanto que los objetos más lejanos tienden a perder partes o a desaparecer y a aparecer mágicamente. Ni siquiera el DLSS en modo calidad, que es conocido por mejorar la calidad de los objetos más lejanos y eliminar los dientes de sierra, tiene un efecto positivo en este título.

Mal rendimiento, fallos graves y un desarrollo genérico

Incluso con el equipo de pruebas utilizado el rendimiento de Forspoken no ha sido bueno. La tasa de fotogramas por segundo oscilaba entre los 70 y los 100, una franja muy baja teniendo en cuenta su pobre apartado gráfico y la simplicidad de su desarrollo. Cuando se producen combates intensos y aparecen muchos efectos en pantalla el rendimiento cae de manera significativa, y evidencia que los problemas de optimización son mayores de lo que nos imaginábamos.

El stuttering y los microtirones son una constante al jugar, y hacen que nunca lleguemos a tener una experiencia verdaderamente fluida, ni siquiera aunque nos mantengamos siempre por encima de los 60 fotogramas por segundo. Como os he dicho al principio de este artículo, nada más empezar a jugar a Forspoken este nos recibe con microtirones, y estos se repiten cuando movemos la cámara de forma rápida para mirar a zonas del escenario que no eran visibles (para mirar hacia atrás, por ejemplo).

Además del rendimiento irregular, el stuttering y los microtirones Forspoken presenta problemas de popping, algo incomprensible teniendo en cuenta que está diseñado para aprovechar de forma plena un SSD NVMe, y también he identificado fallos en el suavizado de bordes que hacen que numerosos objetos aparezcan dentados e incluso «parpadeen» cuando nos movemos en cualquier dirección.

Mi conclusión es simple y clara, a nivel técnico Forspoken no solo no es lo que nos prometieron, es un desastre y representa un downgrade tan grande frente al original que este parece haber sido desarrollado para otra generación totalmente distinta, y muy superior. Sé lo que estás pensando, que este título todavía tendría salvación si la historia fuese buena, y si tuviera una protagonista con carisma y una jugabilidad innovadora, pero lamentablemente tampoco es así.

La protagonista no tiene encanto, la historia no es nada del otro jueves y la jugabilidad es bastante genérica y se nota algo forzada en ocasiones, tanto que ya al completar mi primera media hora de juego ya me notaba algo aburrido. Incluso aunque seas un amante del género no te recomiendo comprar Forspoken, ya que ha pasado de ser una de las mayores promesas del año a convertirse en una de las mayores decepciones. No vale los 80 euros que cuesta, y un 51% de los usuarios de Steam piensa lo mismo.

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