Las mejores series de 2022, según MC
Encaramos ya la recta final del año con un especial más de nuestros mejores de 2022 y lo hacemos con contenidos, sí. Como puedes ver en el titular, entramos de lleno en el ocio con las mejores series de 2022… según MC, y es que con este y los demás especiales que quedan por publicar, nos dejamos llevar totalmente por nuestros gustos personales para recomendar lo más nos ha gustado a nosotros, o sea, lo mejor para nosotros de lo que ha dado el año.
Cabe tenerlo en cuenta porque especialmente con el tema de los contenidos, la generación de series, pero también de películas y juegos es tan ingente que… ¿cuándo explotará la burbuja? En algún momento lo hará, pero mientras tanto, vamos consumiendo lo que la vida nos deja, que no es demasiado. Tenlo en cuenta, porque nuestras opiniones incluyen lo mejor de lo que hemos visto, ojo con eso. Así que no te extrañes si no encuentras aquí una recopilación «ordinaria».
Las mejores series de 2022, según MC
Como siempre, eso sí, el único requisito que nos hemos autoimpuesto para escoger las mejores series de 2021 es el de elegir solo series que se hayan estrenado este año, es decir, que hayan lanzado su primera temporada este año, al menos en España. Por supuesto, estás invitado a participar y a recomendarnos las que más te hayan gustado a ti.
La Casa del Dragón
- Género: fantástico
- La puedes ver en HBO Max
- Recomendado por Juan Ranchal
Este año no me toca ser original. He visto menos novedades que las que me gustaría y apuesto por lo seguro porque el spin-off de Juego de tronos ha batido récords de audiencia en HBO y a buen seguro la han visto muchos de nuestros lectores. Competencia mediática con la otra gran superproducción lanzada en la temporada otoñal (El Señor de los Anillos: los Anillos de Poder de Amazon Prime) La Casa del Dragón es de esas series que aseguran nuevos suscriptores.
Basada en la novela Fuego y sangre de George R. R. Martin, cuenta los sucesos acontecidos 200 años antes de lo que vimos en el comienzo de Juego de tronos y en concreto, la historia del origen del fin de la casa Targaryen en medio del conflicto conocido como la Danza de dragones que terminó derivando en la división de la realeza en dos bandos por la elección del heredero al trono de hierro.
Una precuela, por tanto, de esas que los estudios tanto aprovechan para estirar la teta de la vaca de algunos de sus éxitos, pero que en este caso (a mi juicio) mantiene el gran nivel de su predecesora. Sigue George R. R. Martin en el guión y la producción y Miguel Sapochnik (responsable de algunos de los mejores capítulos de Juego de tronos) dirige el episodio piloto.
Hay que decir que esta primera temporada es una toma de contacto con situación y personajes y que por ello puede faltarle algo de ritmo especialmente en sus primeros y bastantes previsibles primeros capítulos. Sin embargo, los últimos que hemos visto ya nos indican que volveremos al dramatismo y la épica de Juegos de tronos. La primera temporada solo cubre un tercio del libro y George R. R. Martin dijo que había material para otras tres temporadas más.
Una serie recomendada y que seguramente como ha sucedido en mi caso, habrá dado pie a que muchos seguidores vuelvan a ver Juego de tronos, el gran bombazo de HBO que desde el pasado verano está disponible en una nueva versión mejorada en gráficos y sonido, con soporte para 4K Ultra HD, HDR 10, Dolby Vision y Dolby Atmos.
The Dropout: Auge y caída de Elizabeth Holmes
- Género: drama
- La puedes ver en Disney+
- Recomendado por Rodolfo de Juana
Como una Steve Jobs de la ciencia médica. Así quería presentarse ante los inversores, los clientes y los empleados de Theranos, Elizabeth Holmes, la fundadora de una de las startups más polémicas de los últimos años.
La historia de Theranos es conocida. La de Elizabeth Holmes es la historia de una mente brillante cuya startup prometía revolucionar la industria médica con una máquina que haría los análisis de sangre significativamente más rápidos y fáciles.
Respaldada por rondas de financiación que llegaron a superar los 1.400 millones de dólares, Theranos consiguió elevar la valoración de la compañía (pre-IPO) hasta los 4.700 millones de dólares. Solo había un problema: la tecnología no funcionaba. Y no solo no funcionaba, sino que el equipo de la compañía, sabiendo los problemas que tenía su dispositivo, proclamaba lo contrario, llegando a estafar a una gran cadena de farmacias y supermercados.
En la miniserie de Disney+ The Dropout: Auge y caída de Elizabeth Holmes seguimos de cerca todos los pasos que da una Elizabeth Holmes (Amanda Seyfried) en una “aventura” en la que llegará a involucrar al propio Larry Ellison. Huyendo del amarillismo fácil, la serie acierta a contar de forma muy descriptiva todo lo que estaba ocurriendo dentro de la empresa y recrea sin excesos las terribles presiones a las que estaba sometida una Elizabeth capaz de cualquier cosa con tal de no dar su brazo a torcer. Bien de principio a fin.
El abogado del Lincoln
- Género: drama
- La puedes ver en Netflix
- Recomendado por J. Pomeyrol
Según parece, este 2022 está muy claro cuáles han sido las grandes series del año y cuáles han sido las peores o, al menos, por un motivo u otro, los grandes batacazos. En esas dos listas figuran nombre como La Casa del Dragón, Separación, El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder o Resident Evil, entre otras. Sin embargo, ni he visto todas las que entrarían en el saco bueno, ni me decanto por una una de ellas.
Por el contrario, de todo lo que he visto este año me quedo con algo del montón a priori, pero que a mí me hizo ilusión ver y comprobar que era más o menos lo esperado: El abogado de Lincoln, una suerte de remake serializado y personalizado de la película del mismo nombre que Matthew McConaughey protagonizase hace más de una década bajo el título de El inocente en España. Así la introduje cuando salió:
«¿Qué tiene de especial El abogado de Lincoln, cuando la crítica no la está recibiendo precisamente bien? Además, se trata de la típica serie de abogados que mucha frescura no viene a aportar. Además de lo dicho, un punto a su favor es recuperar un género de esos que dan para maratón y, a pesar de lo que diga la crítica, el pedigrí de la serie no es menor. El abogado de Lincoln es lo nuevo del veterano productor estadounidense David E. Kelley, responsable de clásicos de la televisión como El abogado, Ally McBeal, Boston Legal o, más recientemente, Goliat, Big Little Lies o The Undoing. Solo por eso se merece el beneficio de la duda.»
Y cumplió…. sin destacar en nada, pero con un buen nivel en todo: producción, trama, ritmo, reparto… Así como por recuperar un género un tanto desdibujado estos días -porque El abogado de Lincoln tiene más en común con el suspense criminal Goliat que con el resto de series de David E. Kelley (sobre todo con los dramas de abogados, su gran aportación a la ficción televisiva)- que, no obstante, sigue siendo muy agradable de ver. Y sin las mamarrachadas forzadas tan habituales en estos días.
Dicho lo cual, quiero hacer dos menciones especiales a otras dos series que salieron este año y que me encantaron: la primera la reseña mi compi Juan, La Casa del Dragón, y la segunda fue para mí una de las sorpresas del año: la serie de animación para adultos La leyenda de Vox Machina.
She-Hulk: abogada Hulka
- Género: comedia, superhéroes
- La puedes ver en Disney+
- Recomendado por Inés Herrero
No podemos negar que She-Hulk: abogada Hulka ha dado bastante que hablar, para bien y para mal, consiguiendo dividir las opiniones del grueso de fans de Marvel.
A estas alturas, me parece un acierto tener un producto centrado en la comedia, después de haber explorado el género en películas como Guardianes de la Galaxia o series como Ms. Marvel. Esto, mezclado con cierto matiz especial, gracias a su tono crítico y reivindicativo, ha sido para mí un soplo de aire fresco.
Empecemos por los personajes. Algunos se han quejado de la cantidad de personalidades «superheroicas» absurdamente ridículas que han hecho acto de presencia a lo largo de la serie y, en este aspecto, a ver, queramos o no, esto también es una parte (y bien grande) de los cómics de Marvel, así que no debería sorprendernos tanto. En cuanto a los protagonistas y secundarios principales, encontramos personajes divertidos, interesantes e incluso complejos, con un desarrollo a lo largo de la trama. Tatiana Maslany es una protagonista fantástica, más cercana que muchos otros superhéroes, generando una empatía instantánea y demostrando su potencial para futuras apariciones en la pequeña o la gran pantalla.
El recurso más interesante de la serie lo encontramos en la ruptura de la cuarta pared, con un aire a la serie Fleabag (título que recomiendo encarecidamente), que también explora el humor desde el patetismo y las desgracias que le suceden a su protagonista. En el caso de She-Hulk, se lleva este elemento un nivel más allá, para dar pie a una reflexión interesantísima sobre la industria de los superhéroes y su fandom más tóxico, los verdaderos villanos de esta historia (y de alguna más fuera de pantalla).
Pero esta serie no se detiene solo en las risas, tranquilos, que también podréis encontrar una buena ración de peleas para completar el conjunto. Ah, y no olvidemos los cameos, que a estas alturas se han vuelto casi imprescindibles en los productos de Marvel. No sé cuánto más se podrá abusar de esta herramienta, que está malacostumbrando a los fans a esperarla en cada producto de la compañía, pero me estoy desviando del tema.
En conclusión, She-Hulk es una serie divertida, que rompe los esquemas predeterminados del género y consigue sorprender en cada episodio. Junta humor, acción, tensión y una buena ración de feminismo. Y, aunque su final haya incomodado a unos cuantos, opino que esto mismo es la prueba definitiva de lo necesario que era.
Chainsaw Man
- Género: anime, acción
- La puedes ver en Crunchyroll
- Recomendado por Eduardo Medina
Chainsaw Man es un animé que combina fantasía, comedia, algo de terror ligero y mucha violencia, hasta el extremo de poder ser calificado como una auténtica gamberrada con aparentes influencias de Quentin Tarantino.
El protagonista de Chainsaw Man es Denji, un chico que ha vivido siempre en la pobreza y que ha tenido que coger comida de hasta de la basura para sobrevivir. Con tal de ganar dinero es capaz de hacer cualquier cosa, hasta cazar demonios con la que es en un principio su mascota, un perro con sierra mecánica llamado Pochita. El perro también hace labores como herramienta, aunque eso no quita que, dentro de sus pocos y pobres recursos, Denji lo cuide y quiera de verdad.
Sin embargo, Denji, que vive ahogado por las deudas, es traicionado por una persona de su confianza y acaba muerto. Al rato se convierte en Chainsaw Man para vengarse de quienes le traicionaron y mataron. Tras ese incidente, recala en una organización dedicada a cazar demonios y que le saca de la situación de pobreza en la que está.
Tras superar en apariencia su precaria situación económica (o al menos mejorar bastante en esa faceta), Denji va conociendo a distintos personajes que hay o que recalan en la organización y se va a vivir al piso de uno de sus compañeros. Aparte de los previsibles combates, los cuales son todo un despliegue de gore, tenemos la típica historia del adolescente que se está transformando en adulto, con las inquietudes sexuales que suelen tener los chavales a esas edades. También se profundiza en los traumas del protagonista derivados de su anterior situación de pobreza.
La serie llega a tener un ritmo bastante alto y poco a poco el espectador va conociendo detalles de las vidas de los personajes. De todos ellos la que destaca es Makima, quien tiene un alto rango dentro de la organización y su escaso protagonismo después de los primeros capítulos deja entrever que se trata de alguien muy poderoso y que podría tener intenciones ocultas.
Por lo demás, Chainsaw Man es una serie gamberra, frenética y violenta, no apta para menores y que sería recomendable no ver mientras se está comiendo o bebiendo, ya que algunas escenas llegan a ser bastante incómodas y pueden herir la sensibilidad incluso de los que están habituados a este tipo de contenidos.
Estamos muertos
- Género: terror, zombi
- La puedes ver en Netflix
- Recomendado por Isidro Ros
Algunos dicen que los apocalipsis zombis pasaron de moda. Yo, la verdad, los sigo disfrutando como el primer día. Siempre me ha gustado el género, aunque mi “fiebre” por este tipo de historias se disparó el día que jugué por primera vez a Resident Evil en la PlayStation original. Fue una experiencia única, y Resident Evil 2 no hizo más que consagrar mi pasión por dicho género.
No obstante, es cierto que se ha convertido en algo muy manido y que últimamente me he encontrado contenidos, tanto juegos como series y películas, que no me han gustado en absoluto, y que incluso me han llevado a tomarme algunos descansos y a seleccionar mejor lo que juego y lo que veo relacionado con esta temática.
Cuando vi el anuncio de Estamos muertos tuve sensaciones enfrentadas. Me temía que iba a acabar viendo una serie cutre centrada el drama adolescente del “no me quiere”, y aunque es cierto que este tema hace acto de presencia lo cierto es que, al final, la serie hace un excelente trabajo recreando un apocalipsis zombi en Corea del Sur, y tanto la escenografía como la ambientación y la caracterización de los zombis se han cuidado muchísimo, lo que hace que el resultado final sea muy bueno, y que la serie sea un “caramelo” para los amantes del género.
Un soplo de aire fresco al género, bien resuelta y bien ejecutada que no cojea en ningún sentido, ya que incluso sabe encajar bien los dramas personales de cada uno de los personajes, y no abusa de ellos para evitar se hartazgo que podemos encontrar en otras series. Deseando estoy de ver la segunda temporada, que ya fue confirmada hace unos meses. Si te gustan los zombis no deberías perdértela.
Apagón
- Género: drama, suspense
- La puedes ver en Movistar Plus
- Recomendado por David Salces
Hay distopías y distopías. Por una parte están aquellas con hipótesis más complejas, ejercicios de creatividad generalmente muy interesantes, pero que tendemos a ver cercanas a la ciencia ficción o, cuanto menos, al fruto de altos niveles de fantasía creadora. Y luego están las otras, aquellas que parecen tan cercanas que hasta es posible que, en algún momento, hayamos fantaseado con ellas.
Por otra parte, hay distopías planteadas para ser blockbusters, paradigmas del cine palomitero (dicho sea esto con el mayor de los respetos, pues también es un género que disfruto), mientras que la propuesta de otros es mucho más áspera, mucho menos glamourosa, sin un meteorito cuyo curso desviado en el último momento tras una sonrisa Profident y una frase ingeniosa. En su lugar, solo hay personas muy normales que, con sus limitaciones y sus vidas grises, deben enfrentarse a unas circunstancias excepcionales.
El pasado siete de noviembre una llamarada solar golpeó la Tierra, provocando apagones de radio en la banda de onda corta que afectaron a gran parte del Pacífico Sur, incluyendo buena parte del territorio de Australia y toda Nueva Zelanda. En Apagón, como su propio nombre indica, una serie de tormentas solares inutiliza las instalaciones eléctricas y, con ellas, también los sistemas de comunicaciones, los de emergencias… todo.
Apagón de Movistar Plus, es una distopía cercana, plausible, de las que a veces se pasan por nuestra imaginación. Y es una distopía absolutamente carente de glamour. Es áspera, es incómoda, por momentos es lenta y, en general, tremendamente angustiosa. Si te metes en su trama la ves mirando de reojo la luz más cercana, y hasta chequeando de vez en cuando la pantalla de tu móvil, especialmente si la ves coincidiendo con un suceso como el que he mencionado en el apartado anterior.
Con tan solo cinco episodios, cada uno de ellos dirigido por un director distinto (Rodrigo Sorogoyen, Raúl Arévalo, Isa Campo, Alberto Rodríguez e Isaki Lacuesta), nos llega a cómo se experimenta la situación desde distintas situaciones: desde los responsables de Protección Civil, hasta un pastor de los de antaño, que no tiene necesidad alguna de electricidad.
No es una serie para ver mientras cenas, ni justo antes de irte a la cama, porque la angustia que se pega al estómago no es buena compañera en ambas situaciones. Una angustia que, en muchas ocasiones, tiene que ver con la facilidad con la que podemos llegar a vernos reflejados en unos personajes tan, tan poco divinos y heróicos, que son desoladoramente humanos.
Vigilante
- Género: terror, suspense
- La puedes ver en Netflix
- Recomendado por Sergio Delgado
Ha sido una de esas sorpresas que, de repente, aparecen en el top ten de visualizaciones en plataformas. De hecho, ni la propia Netflix se esperaba que Vigilante tuviera el éxito que ha tenido gracias, sin duda, al boca-oreja. Claro está que no es una serie de terror más, es una (nueva) obra de arte del género creada por uno de los directores y guionistas más prolíficos de la pequeña pantalla, Ryan Murphy. El padre de títulos multipremiados y elogiados por crítica y público como Feud y la antología de American Horror Story. También en el cine ha recibido aplausos por The Normal Heart (y no tantos por Come, reza, ama).
Vigilante utiliza elementos propios del terror más clásico: personajes oscuros, una enorme casa con aires fantasmagóricos, una música capaz de poner los pelos de punta y acompañar la acción de la película como una protagonista más… y la típica familia bien estadounidense que deja la gran ciudad para vivir más `tranquilos´ en las afueras sin pensar todo lo que en esa casa les va a ocurrir. Pero ¿quién es el vigilante?
Protagonizada por unos brillantes Naomi Watts y Bobby Cannavale, está basada en hechos reales, lo cual la hace aún más interesante. Unos hechos ocurridos en Westfield, New Jersey, donde una persona anónima empezó a dejar cartas amenazadoras en el buzón de la vivienda de una familia adinerada que se había mudado en 2014 al 657 Boulevard de Westfield, N.J. Vigilante es una sucesión de episodios de acoso y paranoias que enloquece al matrimonio, hace tambalear su matrimonio y mantiene al espectador con ganas de ver la serie de un tirón. Todos, incluso los protagonistas, son sospechosos de ser el vigilante.
Compuesta por siete episodios, este pasado mes de noviembre se confirmó que la serie tendrá una segunda temporada donde el misterioso vigilante promete seguir poniendo la vida de Los Brannock o de quién viva en dicha casa patas arriba.
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