Requisitos que debe cumplir un SSD para funcionar con PS5

Sony ha confirmado, por fin, qué requisitos debe cumplir un SSD compatible con PS5, su consola de nueva generación. Muchos usuarios de dicha consola esperaban con ansia esta información, y es que, al final, contar con 825 GB de capacidad de almacenamiento, de los cuales solo quedan libres unos 660 GB, hace que sea casi obligatorio plantearse ampliar su capacidad añadiendo un SSD.

Para poder instalar un SSD compatible con PS5 tendremos que esperar al lanzamiento de la próxima gran actualización de firmware que recibirá dicha consola. Su fecha de llegada todavía no ha sido concretada, pero ya se encuentra en versión beta, así que podemos decir que su llegada está prácticamente a la vuelta de la esquina, y que se cumplirán las previsiones que apuntaban a este verano. Obvia decir que si intentamos instalar un SSD sin haber actualizado, este no funcionará.

Antes de entrar a ver los requisitos que debe cumplir un SSD compatible con PS5, quiero recordaros que esta consola viene preconfigurada con un SSD que es capaz de alcanzar una velocidad de 5,5 GB/s. Ese nivel de rendimiento está totalmente fuera del alcance de las unidades de tipo PCIE Gen3 x4, lo que significa que solo aquellas basadas en el estándar PCIE Gen4 x4 darán lo mejor de sí en la consola de Sony.

SSD compatible con PS5

Requisitos que debe cumplir un SSD compatible con PS5

Obviamente, debe tratarse de una unidad en formato M.2, tiene que ser compatible con el estándar PCIE Gen4 x4 NVMe, y Sony recomienda que tenga una velocidad de 5,5 GB/s en lectura secuencial. Sobre este tema, es importante tener en cuenta que se trata de un valor recomendado, es decir, en teoría no es un requisito mínimo, por lo que podríamos montar un SSD con una velocidad inferior, aunque obviamente podríamos experimentar problemas de rendimiento, especialmente en aquellos exclusivos diseñados para aprovechar al máximo el SSD original de PS5.

Un SSD compatible con PS5 puede utilizar las distintas variantes que incluye el factor de forma M.2, es decir, las versiones 2230, 2242, 2260, 2280 y 22110. En cuanto a la capacidad, Sony indica que solo podemos instalar unidades SSD con una capacidad mínima de 250 GB, y con una capacidad máxima de 4 TB. Esto quiere decir que si intentamos montar una unidad de 128 GB no debería de funcionar, al menos en teoría, ya que cuando lo ponemos en contexto vemos que actúa como requisito aparentemente excluyente.

Otro requisito imprescindible que debe cumplir todo SSD compatible con PS5 es contar con un sistema de refrigeración pasiva. Si intentamos instalar un SSD que no cuente con dicho sistema de refrigeración, este funcionará si cumple el resto de requisitos, pero acabaremos teniendo problemas por la acumulación de calor y las altas temperaturas de trabajo. Eso es, al menos, lo que Sony nos da a entender al listar este requisito.

Por lo demás, la unidad SSD deberá tener unas medidas, incluyendo el sistema de refrigeración pasiva, inferiores a 110mm (largo) x 25mm (ancho) x 11.25mm (alto). Os recuerdo que PS5 no soporta la tecnología Host Memory Buffer, así que aquellos SSDs que sí la soporten podrían ofrecer un rendimiento por debajo de lo esperado.

Será interesante ver cómo rinde un SSD compatible con PS5 que no llegue a esos 5,5 GB/s, y qué impacto acaba teniendo en títulos exclusivos con una alta dependencia de dicha unidad de almacenamiento.

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