¿Es posible mejorar una conexión a Internet lenta sin gastar dinero?

El confinamiento provocado por el COVID-19 ha puesto a prueba la conexión a Internet de muchos hogares. Estar más tiempo en casa y con una mayor concurrencia de personas puede representar un desafío importante para nuestra conexión a Internet, sobre todo cuando se producen situaciones de uso simultáneo de varios dispositivos con aplicaciones o tareas que consumen un gran ancho de banda.

Podríamos solventar esa situación cambiando el router por un modelo de última generación, o creando una red Wi-Fi Mesh, ¿pero es posible mejorar nuestra conexión a Internet sin gastar dinero? Es una pregunta interesante que se hacen muchas personas a día de hoy, y en este artículo os vamos a ayudar a responderla. También compartiremos con vosotros una serie de consejos que os ayudarán a poner a punto vuestra conexión para tener la mejor experiencia de uso posible, y sin coste.

Es importante tener en cuenta, antes de empezar, que la velocidad de la conexión a Internet que tengamos contratada, así como la calidad del servicio que ofrezca nuestro proveedor, jugará un papel clave. Si esta no llega a un nivel mínimamente aceptable no podremos hacer milagros, y tendremos que hablar directamente con el proveedor para realizar las reclamaciones que correspondan.

1.-Uso de Internet en diferentes lugares de nuestro hogar

Es uno de los problemas más importantes y más frecuentes. Antes del confinamiento el uso de Internet en casa era mucho más limitado y se concentraba, en la mayoría de los casos, en espacios muy concretos, una situación que hoy ha cambiado de forma notable y que plantea un reto que, por suerte, no es demasiado difícil de resolver.

Si te encuentras en esta situación y el uso de tu conexión a Internet desde diferentes dispositivos ha cambiado a otras ubicaciones de tu hogar donde no llega bien la señal no te preocupes, puedes solucionarlo de una manera sencilla y sin tener que gastar dinero: cambiando la ubicación del router y eliminando, en la medida de lo posible, los obstáculos que este pueda encontrar por el camino.

Colocar el router en una posición elevada y un poco más cercana a los lugares donde queremos que nos llegue la conexión, dejar las puertas abiertas y quitar cualquier dispositivo que produzca interferencias puede marcar una diferencia importante.

2.-Uso inteligente de la conexión a Internet

Si todos hacemos uso de la conexión a Internet de forma simultánea y nos ponemos a ver contenidos en streaming en HD o a descargar cosas pesadas la saturaremos prácticamente al instante. Es un problema importante, pero podemos resolverlo de una manera muy sencilla: haciendo un uso inteligente y responsable.

Lo ideal es establecer horarios y acuerdos con todos los miembros de la familia para que cada uno pueda disponer del ancho de banda y de la estabilidad que necesita durante un tiempo determinado. En el caso de las descargas pesadas podemos aprovechar para realizarlas cuando tengamos claro que nadie se va a conectar a Internet.

Por ejemplo, podríamos dejar la descarga de contenidos y aplicaciones pesadas mientras echamos una siesta y no utilizamos Internet, o incluso durante la noche, si se trata de descargas que van a requerir de varias horas.

3.-Otras formas de mejorar una conexión a Internet lenta

Actualizar el router es una de las más sencillas y efectivas. Algunos fabricantes, como AVM, lanzan actualizaciones periódicas que introducen mejoras tanto a nivel de rendimiento como de estabilidad, y también pueden traer nuevas funciones interesantes.

Para conseguir los mejores resultados no debemos obsesionarnos con el estándar Wi-Fi 5. Sí, es más rápido, pero tiene un alcance inferior comparado con el Wi-Fi 4, lo que significa que en ciertas situaciones el segundo puede ser mejor opción. Por ejemplo, si vas a utilizar tu smartphone conectado a Internet desde tu habitación y esta está muy lejos del router sería mejor que te conectaras a la banda de 2,4 GHz.

Desactivar los protocolos antiguos, como Wi-Fi 3 e inferiores, puede ayudarnos a mejorar el rendimiento de nuestra red de forma importante, y también podemos entrar al menú de configuración del router y cambiar los canales y el ancho de los mismos para mejorar nuestra conexión a Internet. Los routers más actuales llevan a cabo este proceso de forma automática.

Orientar las antenas, en caso de que sea posible, también puede ayudarnos a mejorar nuestra conexión Wi-Fi, y en ciertos casos un simple reinicio del router también puede tener efectos positivos. Solo te llevará unos segundos, así que dale una oportunidad.

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